AEMET ha llenado de avisos amarillos y naranjas buena parte del país. El calor en amplias zonas del centro y el sur está siendo tan intenso durante el jueves y el viernes que se superarán, fácilmente, los 40 grados en el valle del Guadalquivir y parte de los valles del Guadiana y el Tajo.

Y más allá de eso, habrá “temperaturas significativamente elevadas en la meseta Sur, centro peninsular y valles de Ebro, Duero y Guadalquivir”. Nada raro: es julio, hace calor y, sin embargo, en cuestión de horas, vamos a sufrir (o a disfrutar) un “descenso térmico acusado”.

¿Otra vez bajan las temperaturas? Efectivamente. Como explican desde AEMET, “una vaguada cruzará la Península durante el fin de semana” y eso dejará tormentas en toda la zona norte y este. Y, como consecuencia, las temperaturas de todo el territorio peninsular bajarán.

Para subir de nuevo a partir del martes, eso sí. Cuando se instalará entre nosotros, de nuevo, la dorsal anticiclónica que nos suele afectar durante el verano.

¿Eso significa que por fin tendremos el calor del verano? No exactamente. Según los modelos de referencia de AEMET, durante la semana del 8 al 14 las temperaturas serán inferiores a lo habitual en el Oeste y el centro de la Península. Podrán ser algo más altas en zonas del este, pero no se esperan grandes episodios de calor.

La siguiente semana, teniendo en cuenta las incertidumbres inherentes a las predicciones a tan largo plazo, sí se esperan calores un poco más intensos de lo habitual. Pero durante la siguiente empieza a dibujarse una anomalía fría por el sureste que no tenemos muy claro cómo evolucionará.

Sea como sea, por ahora no se ven episodios muy intensos de calor en el horizonte.

¿Cómo de raro está siendo este verano? Efectivamente, si tenemos en cuenta los últimos 12 meses, junio ha sido el primer mes que ha sido “fresco” y rompe una racha de más de un año de meses cálidos. No obstante, como ha analizado Roberto Granda, si comparamos junio de 2024 con los valores medios de los últimos años, podemos comprobar que ha sido un mes completamente normal. Solo sitios como Pontevedra o Alicante han tenido un mes un poco más cálido de lo normal.

¿Qué podemos esperar? Nadie lo sabe a ciencia cierta. Los modelos del ECMWF daban una alta probabilidad de que viviéramos un verano más cálido de lo normal, pero ese calor no hace más que postergarse. No está de más recordar que julio es el mes más caluroso en el conjunto de la España peninsular, cada día que pasemos sin ‘olas de calor’ es un día “ganado” a una tendencia cada vez más preocupante.

Imagen | ECMWF

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