Hay una persona que lleva desde 2016 intentando demostrar que es el creador de Bitcoin. Ha mentido "extensa y repetidamente"
En este mundo hay dos cosas que muchísimas personas tienen ganas de descubrir: uno, qué es el One Piece. Dos, quién es Satoshi Nakamoto, el creador de Bitcoin. Seguramente descubramos antes lo primero que lo segundo, porque las cosas como son: quien esté detrás del pseudónimo Satoshi Nakamoto no ha vuelto a hacer acto de presencia. ¿O sí? No, seguramente no, pero una persona lleva años intentando demostrar que es él, que es el verdadero Satoshi Nakamoto.
Esta es la historia de Craig Wright.
Corría el año 2016. Todos usábamos el meme de “vamo a calmarno”, las calles estaban llenas de entrenadores jugando a ‘Pokémon GO‘, lo más top era hacer el reto de la botella y Hodor nos dejó con el corazón roto tras su muerte. También fue el año en el que Craig Wright, un emprendedor australiano, confesó ser Satoshi Nakamoto (aunque las primeras informaciones se remontan a 2015) Imagina lo que fue eso. No tan espectacular como ir por la calle y encontrarse un Charizad, pero casi.
Las pruebas. Por aquellos entonces, Wright aportó una serie de pruebas como unos mensajes firmados usando claves criptográficas creadas durante los primeros compases de Bitcoin. Según el australiano, fueron los utilizados para “enviar 10 bitcoins a Hal Finney en enero de 2009 en la primera transacción de bitcoins”. Finney fue uno de los ingenieros que ayudó a crear la criptomoneda. En cualquier caso, había dudas. Para muchos expertos, esto no fue suficiente.
Pruebas extraordinarias. Eso es lo que prometió Wright, que había publicado un mensaje con una clave criptográfica adjunta que pertenecía a Satoshi Nakamoto (que pudo haber sido reusada de una vieja transacción que Satoshi hizo en 2009). Aseguró que iba a publicar “documentos verificables de forma independiente” y pruebas que harían “referencia a las falsas acusaciones”. En su lugar, eliminó su blog y dejó una carta titulada “Lo siento” que, básicamente, venía a decir que no podía con la presión y que no iba a dar más pruebas. Ahora esa carta no está disponible.
Satoshi Nakamoto lo tendría muy fácil para demostrar su identidad: solo tendría que mover una cantidad pequeña de la cuenta original a otra
Realmente, demostrar que es Satoshi Nakamoto sería tan fácil como firmar un mensaje cualquiera usando la clave PGP privada original del creador de Bitcoin. Si puedes, ¿por qué no usarla y zanjar el asunto? “No voy a seguir saltando a través de aros”, le decía a The Economist cuando estos le pedían más pruebas. Eso, o mover los Bitcoin de la cuenta original a otro monedero.
La cosa es que, según dijo en 2022, esto no sería posible ya “pisoteó el disco duro” que contenía las claves necesarias para conseguir el acceso a las claves privadas de Satoshi Nakamoto. Una lástima, desde luego, porque el pasado 5 de enero alguien metió en la llamada cuenta Génesis 1,17 millones de dólares por algún motivo.
Registro del White Paper. En abril de 2019, Wright registró el White Paper de Bitcoin (el que publicó Satoshi Nakamoto) y el código de Bitcoin 0.1 en la USCO (United States Copyright Office) con el objetivo de reclamar la propiedad intelectual de Bitcoin. Según su equipo, este registro era el “primer reconocimiento de una agencia gubernamental de Craig Wright como Satoshi Nakamoto, el creador de Bitcoin”.
Poco más tarde, la USCO publicó un comunicado diciendo que “la Oficina de Derechos de Autor no investiga si existe una conexión demostrable entre el reclamante y el autor seudónimo”. Pero las cosas como son: había conseguido registrar el archivo.
Una de las personas a las que Wright demandó fue a Vitalik Buterin, creador de Ethereum
2019 fue también un año lleno de denuncias por difamación. Wright no dudó en demandar a todos los que le acusaban de mentiroso y de fraude. Entre ellos, a Vitalik Buterin, creador (100% real no fake) de Ethereum. También demandó a un conocido influencer de criptos noruego, Hodlonaut, que acabó saliendo victorioso. También demandó a un podcaster, Peter McCormack, aunque se acabó echando para atrás.
En 2022, por cierto, Wright demandó a Coinbase y Kraken, dos populares exchanges de criptos, y a algunos desarrolladores por violar su copyright al usar el término “Bitcoin” y dañar la reputación de BSV (Bitcoin Satoshi Vision), una cripto que el propio Wright había creado en 2018 bajo la premisa de ser lo más cercano al diseño original de Satoshi Nakamoto.
Llega la COPA. Ante esta situación, una organización respaldada por Jack Dorsey llamada COPA (Cryptocurrency Open Patent Alliance) que aglutina a los principales agentes del sector, demandó en Reino Unido a Wright en febrero de 2021. El objetivo era evitar que Wright siguiese reclamando el copyright del whitepaper de Bitcoin y del código. El caso llegó a los tribunales el pasado 5 de febrero y el resultado ha sido claro: según el tribunal de Reino Unido, no es Satoshi Nakamoto.
La COPA acusó a Wright de manipular y falsear pruebas “a niveles industriales”, entre ellas algunos documentos de Word modificados para cambiar las fechas; documentos escritos a mano falsos; copias del documento técnico de Bitcoin modificadas para que parecieran borradores (con metadatos y fuentes que no estuvieron disponibles hasta 2017) y hasta un disco duro falsificado que había descubierto casualmente y que contenía evidencias del trabajo previo a la publicación del Libro Blanco. Hay contenido en dicho trabajo que, según la COPA, se había hecho con ChatGPT. Wright, por supuesto, negó la mayor.
Veredicto: no es. Tras unas cinco semanas de juicio, el juez James Mellor del Tribunal superior de Londres dictaminó que Craig Wright no era Satoshi Nakamoto y ordenó congelar seis millones de libras esterlinas para evitar que Wright no pagase los gastos judiciales. En cuanto a la identidad, sus propias palabras fueron las siguientes:
“[…] Habiendo examinado todas las pruebas y alegaciones que se me han presentado en este juicio, he llegado a la conclusión de que las pruebas son abrumadoras. Por lo tanto, por las razones que se explicarán en esa sentencia escrita en su momento, haré ciertas declaraciones que me parecen útiles y necesarias para hacer justicia entre las partes:
En primer lugar, que el Dr. Wright no es el autor del Libro Blanco del Bitcoin.
En segundo lugar, el Dr. Wright no es la persona que adoptó u operó bajo el seudónimo de “Satoshi Nakamoto” en el periodo comprendido entre 2008 y 2011.
En tercer lugar, el Dr. Wright no es la persona que creó el sistema Bitcoin.
Y, en cuarto lugar, no es el autor de las versiones iniciales del software Bitcoin”.
La sentencia. Según explica el juez en el fallo publicado el pasado 20 de mayo, Wright ha mentido “extensa y repetidamente” y ha falsificado documentos “a gran escala” para apoyar su falsa afirmación”. “El Dr. Wright se presenta como una persona extremadamente inteligente. Sin embargo, a mi juicio, no es ni de lejos tan inteligente como él se cree”, asegura. “Todas sus mentiras y documentos falsificados estaban en apoyo de su mayor mentira: su afirmación de ser Satoshi Nakamoto”, concluye.
Wright, por su parte, ha dicho que va a apelar. Respecto a los otros pleitos, quedaron vinculados a la sentencia.
El misterio sigue. ¿Quién es Satoshi Nakamoto? No se sabe y seguramente nunca lo sepamos, aunque quizá sea lo típico que dentro de 40 años, en su lecho de muerte, alguien lo confiesa y la noticia da la vuelta al mundo, una plataforma de streaming saca una serie, se venden libros, merchandasing, etc.
Con One Piece, a este ritmo, seguramente ocurra lo mismo.
Imágenes | craigwright.net | Kanchanara