Por primera vez en la historia, los astrónomos están viendo en tiempo real cómo despierta un agujero negro
El monstruo ha despertado, y tiene hambre. En diciembre de 2019, una galaxia tranquila y de escaso interés a 300 millones de años luz de la Tierra empezó a brillar intensamente. Los astrónomos creen que están presenciando el despertar de un agujero negro supermasivo.
La dramática transformación de SDSS1335+0728. Con este nombre tan práctico se conocía desde hacía años una insulsa galaxia situada en la constelación de Virgo. Siempre calmada y aburrida, desde finales de 2019 se ha convertido en una bestia resplandeciente.
Fenómenos como una supernova o un evento de disrupción de marea (en el que una estrella es espaguetizada por la gravedad de un agujero negro) pueden causar un incremento puntual en el brillo de una galaxia. Pero estos eventos duran días, no años. Y SDSS1335+0728 sigue brillando cada vez más fuerte cuatro años después de su primer destello.
La explicación que mejor encaja. En busca de explicaciones alternativas, los astrónomos del Observatorio Europeo Austral (ESO) combinaron datos de archivo con nuevas observaciones y descubrieron que la galaxia ahora emite mucha más luz en las longitudes de onda ultravioleta, visible e infrarroja, y además empezó a emitir rayos X en febrero de este año.
La explicación más probable para este comportamiento es que estamos observando por primera vez en directo la activación de un agujero negro supermasivo en el centro de una galaxia, dicen los investigadores.
El despertar de un agujero negro. Según esta hipótesis, el agujero negro supermasivo en el centro de SDSS1335+0728 ha empezado a alimentarse del gas circundante, volviéndose extremadamente brillante.
Los agujeros negros supermasivos tienen masas 100.000 veces superiores a la del Sol. Suelen estar dormidos, lo que impide su observación directa, aunque residen en el centro de la mayoría de las galaxias, incluida la Vía Láctea. Nuestro agujero negro se llama Sagitario A* y también ha mostrado signos recientes de actividad.
Imágenes | ESO